Javier Aguado

Desde octubre de 2013 he estado enviando solicitudes para trabajar como investigador o profesor universitario en Inglaterra, Suecia, Alemania y Estados Unidos, todas sin éxito (aún). No he dicho todavía (a propósito) que perdí mi trabajo en septiembre y que, como al parecer le pasa a otras personas en situaciones parecidas, quiero aprovechar esto para vivir nuevas experiencias. Me he quedado sin trabajo porque había candidatos mejores, personas que han desarrollado unas habilidades más adecuadas que las mías para esa función. Es necesario reconocerlo. Estoy casi seguro de que mis habilidades son mejores fuera de España. Tampoco pasa nada por reconocer eso. Acabo de cumplir 43 años. Normalmente uno no tiene consciencia de su edad, ni de muchas otras cosas, así que va por el mundo caminando como un apuesto veinteañero. Aprovecho para decir que la cosas más importante que he aprendido en todos estos años es que lo ideal es conseguir no ser nada. Respeto que los demás quieran ser algo (investigadores, artistas, españoles, extranjeros… lo que sea), pero creo que se equivocan, o directamente que usan malas excusas. Lo mejor es hacer y sentir cosas, y pensar lo menos posible.

  • 2014